EL USO DE
ANTICONCEPTIVOS
¿Qué dice la
Biblia, respecto a los métodos anticonceptivos incluyendo cirugías en el hombre
o la mujer?
Este es un tema muy delicado y controversial. Debemos tratarlo bíblicamente y con mucha
sensibilidad por amor de las personas cristianas que en verdad se sienten 'agobiados' al tratar de llegar a una
conclusión sobre este tema. Miremos dos vías las cuales traerán claridad y ayudarán
a tomar una decisión sabia y sobre todo bíblica respecto a este
tema.
Primero miremos a lo que dice la Biblia respecto a los hijos
y luego miraremos las situaciones y opciones que pueden ser consideradas cuando
pensamos que acción tomar respecto a este tema.
¿Qué dice la Biblia?
La Biblia no dice "No
evitarás los hijos", pero nos da suficiente información para llegar a
la conclusión de que NO ES una
práctica agradable ante los ojos de Dios. Aunque desde la antigüedad, hace más
de dos mil años atrás, ya se buscaban métodos anticonceptivos en las
civilizaciones antiguas, estos métodos anticonceptivos como los conocemos hoy
en día (pastillas, parches, etc.),
existen desde hace solo unos 30 a 40 años y por lo tanto nada se dice
explícitamente respecto a ellos. Ahora,
sí podemos ver principios los cuales podemos aplicar a estas situaciones.
Según entendemos, la mayor parte de las
denominaciones Protestantes y Evangélicas, la cual está constituida por
distintos grupos y organizaciones parece aceptar tales métodos anticonceptivos.
La Iglesia Católica Romana por otra parte ha declarado tales métodos
inaceptables y en contra de la voluntad divina aunque la mayoría de sus
miembros están en contra de esta ordenanza. Pero lo importante no es lo que
dice uno u otro sino lo que dice la Biblia.
Antes de llegar a una respuesta tenemos que ver cual fue/ es el origen y el propósito de
estos métodos anticonceptivos lo cual nos puede dar luz al respecto cuando
tratamos de llegar a una base bíblica. El problema con los métodos es la raíz o
base (principio) detrás de ellos.
Aunque el evitar los hijos es algo que se ha practicado por siglos, estos
métodos artificiales fueron introducidos después de la segunda mitad del siglo
XX con fin de promover el "sexo
libre" sin el riesgo de llegar al embarazo. Como fin el principal
propósito de estos métodos es el de "EVITAR
LA VIDA" de un ser humano y dar lugar al PLACER SEXUAL ILIMITADO, LIBRE y sin "aparentes" consecuencias de un embarazo indeseado. La relación sexual debe tener lugar solo y
únicamente dentro de los lazos matrimoniales bien establecidos.
Como se puede ver, el principio detrás de esta práctica es
totalmente en contra de lo que Dios ha diseñado y establecido para el hombre y
la mujer.
Génesis 1: 27-28 “Y creó Dios al hombre a su
imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. Y los bendijo Dios,
y les dijo: Fructificad y multiplicaos, llenad la tierra, y sojuzgadla, y
señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las
bestias que se mueven sobre la tierra”.
Como podemos ver, Dios hizo al hombre y a la mujer "para
que se multiplicaran". La razón principal detrás del acto sexual es la
reproducción. Dios desea que los seres humanos se unan en matrimonio y tengan
hijos. El evitar los hijos, entonces va claramente en contra al deseo de Dios.
Hoy día, algunas parejas “cristianas”,
influenciadas por la sociedad, tienen la costumbre de evitar los hijos "para disfrutarse" ó porque no
tienen los medios suficientes para mantenerlos. Este comportamiento es muestra
de por lo menos dos cosas:
1. Irresponsabilidad El hombre antes de casarse debe estar
consciente de que el matrimonio no es solo para compañía y placer sexual (lo cual no es pecado y es muy necesaria
para la pareja) sino que lo es para reproducirse. El hombre que no crea
estar preparado para mantener hijos, entonces no debe de casarse, debe de
esperar hasta que esté preparado hacerlo.
2. Falta de Confianza en Dios porque piensa todo lo obtiene por
su propia fuerza y que Dios no puede suplir todas sus necesidades conforme a
sus riquezas en gloria "Si Jehová
no edificare la casa, en vano trabajan los edificadores" (Salmo 127:1).
Es necesario entender que los hijos no son estorbos a
nuestros planes sino que son parte del plan de Dios para el matrimonio. Dios
pudo haber creado el mundo lleno pero no lo hizo, lo diseñó para que fuésemos
nosotros los que lo hiciésemos. Los hijos son regalo y herencia de Dios:
Salmo 127:3-5 "He aquí, herencia de Jehová son los hijos; cosa de estima el fruto del
vientre. Como saetas en mano del valiente, Así son los hijos habidos en la
juventud. Bienaventurado el varón que lleno su aljaba [casa] de ellos.”
Vivimos en una sociedad tan "mundana" que hasta muchos de los creyentes hombre y mujeres,
ya piensan como los mundanos. Por encima de los intereses familiares está lo
que el mundo ha definido como el "éxito"
en la vida. Las carreras universitarias, los negocios, las posesiones, los
placeres, etc. y no lo ven como Dios lo ve.
Dios dice que los hijos son herencia de Jehová, pero el mundo dice que
son "accidentes indeseados".
El hombre del tiempo moderno es irresponsable y egoísta, no
desea tener que lidiar con la responsabilidad que traen los hijos. Es de entender que toda bendición conlleva
responsabilidad, mientras mayor la bendición, mayor la responsabilidad. Aunque hay casos legítimos donde la pareja no
pueden tener hijos por asuntos de salud, el problema principal detrás de muchos
de aquellos que evitan los hijos no es otro sino el "egoísmo". Cuando el
hombre actúa egoístamente "aun con
relación a la procreación", Dios condena tal proceder.
Onán fue un hombre que evitó tener hijos con la mujer de su
hermano muerto tal como lo establecía la ley, porque era egoísta y no quería
compartir la herencia con el hijo de su hermano. Su proceder fue castigado por Dios con la
muerte. (Génesis
38:1-10)
Dios dice que son cosa de estima, pero el mundo (y muchas iglesias) dice que son estorbo
al ministerio y problemas financieros.
Salmo 128 1-4 “Bienaventurado
todo aquel que tema a Jehová, Que anda en sus caminos. Cuando comieres el trabajo de tus manos,
Bienaventurados serás, y te irá bien. Tu mujer será como vid que lleva fruto a
los lados de tu casa; Tus hijos como plantas de olivo alrededor de tu
mesa. He aquí que así será bendecido el
hombre que tema a Jehová. Bendígate Jehová desde Sión, Y veas al bien de
Jerusalén todos los días de tu vida, Y veas a los hijos de tus hijos. Paz sea
sobre Israel”.
Dios dice que los hijos son herencia de Él, que el hombre
que anda en los caminos de Dios es bienaventurado y que su esposa será como vid
que lleva fruto, los hijos como plantas de olivo alrededor de tu mesa. Eso lo dice Dios, sin embargo la iglesia
moderna dice que es una irresponsabilidad, falta de cultura y educación. Hoy
día, el tener muchos hijos es un atraso, algo "anticuado" y una falta de modernismo.
Algunos han señalado casos donde supuestamente las parejas
han tenido muchos hijos y estos hijos han sufrido las consecuencias de falta de
atención, ropa y alimento. Si confiamos en Dios, y buscamos primeramente el
reino de Dios y su Justicia él nos suplirá todo lo que nos falta y todas las
necesidades serán suplidas por añadidura. El problema está en que los
cristianos modernos, al igual que el mundo ven el lujo como necesidad, por lo
cual la Biblia nos dice:
Santiago 4:3 "Pedís y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites."
Los cristianos de nuestro tiempo están tan conformados a las
corrientes de este mundo que piensan, hablan y actúan como tales.
Tito 2:3-5 “Las
ancianas asimismo sean reverentes en su porte; no calumniadoras, no esclavas
del vino, maestras del bien; que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus
maridos y a sus hijos, a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas,
sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada”.
Son muchos los cristianos que dicen que no es pecado evitar
los hijos porque Dios no quiere que traigamos hijos al mundo a sufrir y por lo
tanto debemos de evitar traer hijos al mundo de esa manera. Lo cierto es que el
deseo de Dios explicito en su Palabra es que el hombre y la mujer casados en
matrimonio tengan hijos.
Romanos 12:2 “No
os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro
entendimiento, para que comprobéis cual sea la buena voluntad de Dios,
agradable y perfecta”.
¿Cuántos hijos son
suficientes?
Todo matrimonio que teme a Dios debe desear producir hijos,
ese es el deseo de Dios (Jeremías 29:6) y mandamiento del Apóstol Pablo a las
iglesias (1 Timoteo 5:14) con el fin de que tengamos una descendencia para
Dios (Jeremías
2:39; Malaquías 2:15), pero habiendo dicho todo esto, no podemos cerrar
sin mencionar que es necesario que cada pareja se pregunte ¿Cuántos hijos son
suficientes? Algunos han llegado a pensar que un solo hijo es suficiente. Otros
piensan que dos es bastante y algunas parejas tienen variadas cantidades de
hijos. Creo que la pareja debe de llegar a un acuerdo mutuo sobre esto pues en
el asunto de la procreación está envuelto tanto el deseo divino como la
voluntad del hombre (Juan 1:13).
¿Qué tipo de
control utilizar?
Desde un punto de vista Cristiano todo uso de control natal
debe de excluir aquellos que son conocidos como "abortivos" ó que causan que el óvulo fecundado sea
abortado. La pastilla es un método comúnmente usado y que funciona con
hormonas. Este sistema "engaña"
al sistema productivo de la mujer para que crea que ella está embarazada y no
produzca óvulos para ser fertilizados, pero también funciona como
"abortivo" ya que afina las paredes del útero causando así de que si
existe un óvulo fertilizado tratando de asentarse en el útero, tal cosa no sea
lograda. Aparte a esto también es importante conocer que las prácticas
anticonceptivas como las pastillas pueden ocasionar daño a las criaturas (al feto) si en el futuro se decide
tener hijos, además de que en ciertos casos produce efectos negativos como
malestar, obesidad y depresión en las mujeres que las utilizan.
Otros medios que no causan muerte del óvulo fertilizado lo
son las cirugías tanto en la mujer como el hombre. El sistema conocido como
"Planificación Familiar” ofrece una forma saludable de hacer espacio entre
los hijos y además no afecta la salud de la mujer ni el hombre y permite que si
en el futuro se desea tener más hijos, se pueda hacer, especialmente en las
parejas jóvenes. Consiste en evitar tener relaciones sexuales durante los tres
o cuatro días del mes cuando la mujer es fértil. Algunos han dicho que el
problema con este sistema del 'ritmo'
es que los niños vienen 'bailando',
queriendo decir que no es efectivo.
Obre según su fe
Finalmente, esto es una decisión personal de cada
matrimonio. Ore junto con su cónyuge para que Dios le guíe en cuanto a cómo
proceder en esta área tan importante de la vida matrimonial. Si alguno de los dos cónyuges llega a la
conclusión que cualquier manera de evitar la procreación es pecado, debe de
estar consciente de que no es bueno forzar a su pareja (esposo / esposa) a que
crea lo mismo. Estas conclusiones deben ser hechas con un espíritu de oración y
acuerdo mutuo. No podemos forzar a otros, aunque sea el cónyuge a pensar de la
manera de pensar nuestra. Este proceder
puede traer muy malas consecuencias en el matrimonio ya que los hijos son responsabilidad
de ambos y no solamente de uno.
Debemos de buscar seguir la voluntad de Dios en todo lo que
hacemos, incluyendo la reproducción y el comportamiento sexual dentro del
matrimonio. Que Dios nos guíe cada día más a la verdad de su Palabra.
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