LIBRO DE DANIEL XIX
DANIEL 9:23-24. Con estos versículos se introduce una de las profecías
más importantes de toda la Biblia. ``La orden´´ debe entenderse como ``la palabra´´. La palabra profética provenía de Dios a Daniel por medio del ángel Gabriel. Es muy importante definir el significado de la palabra
semanas. La palabra ``semanas´´ es usada veinte veces en el Antiguo
Testamento. Tres
veces significa una unidad de siete y va acompañada de la palabra ``días´´ <<Ezequiel 45:21; Daniel 10:2-3>>; ocho veces significa ``semana´´ o ``semanas´´, o sea, un período normal de siete días <<Génesis 29:27-28;
Deuteronomio 16:9-10; 16; Levítico 12:5; 2 Crónicas 13:8>>; y seis veces se usa para
indicar una unidad de siete sin hacer referencia a días <<Daniel 9:24-27>>. En este último caso, el
contexto determina el período de tiempo correspondiente.
El versículo
de Daniel
9:24 enseña seis
aspectos del plan profético de Dios para con Israel que serán cumplidos en un período de
490 años. Esos aspectos son: 1. Terminar la prevaricación; 2. Poner fin al
pecado; 3. Expiar la iniquidad; 4. Traer la justicia perdurable; 5. Sellar la
visión y la profecía;
y 6. Ungir al Santo de los Santos. El 1 de abril
del año 444 a. C. fue
dada la orden por un decreto del rey Artajerjes a Nehemías permitiéndole ir a Jerusalén para dirigir la reedificación de la
ciudad <<Nehemías 2:1-8>>, dando así inicio al período conocido como ``las setenta
semanas de Daniel´´.
Notemos que en este decreto vemos algunos puntos interesantes: 1. Este decreto contiene una referencia directa a la
reedificación de la ciudad <<2:3, 5>>. Del mismo modo se mencionan los muros y las puertas de Jerusalén <<2:3, 8>>. 2. En
Nehemías
2:8 se menciona el
hecho de que Artajerjes escribió una carta a Asaf requiriendo que éste le proveyera material para los
muros de la ciudad. 3. Tanto el libro de Nehemías con Esdras 4:7-23 mencionan que la construcción de la ciudad se
efectuó en ``tiempos angustiosos´´ como los que menciona Daniel 9:25. 4. Después de este decreto ya no hubo
otro que se refiera a la restauración de Jerusalén. La expresión ``Hasta el Mesías
Príncipe´´ es de
vital importancia para determinar el tiempo preciso en que se cumpliría este
tiempo determinado de 69 semanas. Resumiendo, desde la promulgación del
decreto de Artajerjes hasta el Mesías Príncipe transcurrieron 69
semanas, o sea, 483 años. Debe notarse que la muerte del Mesías ocurre ``después´´ de la terminación de las 69
semanas <<v. 26>>.
Con la venida
del Mesías se le provee al ser humano del
remedio a su enfermedad espiritual. El versículo 24 nos dice que él pondrá fin al pecado y la prevaricación y
expiará la iniquidad con su muerte redentora. También menciona su obra
posterior a la cruz y como resultado de su sacrificio redentor: Dar
al hombre justicia eterna, proveerle de la revelación directa por medio de la
Palabra escrita y no por medio de sueños o revelaciones específicas y Ungir o
Santificar el Lugar santísimo y a Jesús el ``Santo de los Santos´´. El príncipe que ha de venir para destruir la ciudad y
el templo es Roma <<año
70>>, ``y su fin será
con inundación´´ se
refiere a la magnitud de la destrucción de Jerusalén.
El versículo 27 habla de un hecho todavía en el
futuro cuando el anticristo vendrá y hará un pacto con muchos del pueblo santo; dicho pacto es conocido como
``El
pacto con la muerte, Isaías 28:14-18´´. La ``abominación desoladora´´ se refiere a la persona del anticristo mismo quien
ocupará la ciudad de Jerusalén y se autoproclamará ``dios´´, exigiendo que todos lo adoren.
Este personaje blasfemo perseguirá a los santos y blasfemará contra el Dios Soberano. Se le permitirá gobernar en forma
absoluta sobre la tierra por un período de 42
meses, es decir, tres años y medio <<Ver Apocalipsis 13:5-8>>.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario